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Aunque el turismo continúa llegando a costas del norte de Veracruz, en zonas como Tecolutla, Tuxpan, Cazones, Nautla entre otros lancheros aseguran que ha bajado la demanda por sus servicios y es que aseguran que ahora sus ingresos son menores.
Los que se dedican a dicha atracción turística, en la zona denominada como Costa Esmeralda aseguran que durante los primeros meses de la pandemia y cuando se cerraron las playas, restaurantes y hoteles comenzaron con un desbalance económico.
Explican que para poder brindar el servicio a los visitantes, sus embarcaciones pagan impuestos de navegación y que es una cantidad de alrededor de 7 mil pesos y aunque tuvieron prórroga de los pagos aseguran que algunos tuvieron que conseguir para dar sus pagos.
Actualmente, aseguran que los fines de semana llega turismo, gente principalmente de Puebla, Hidalgo y CDMX, sin embargo, debido a que en las embarcaciones sólo pueden subir la mitad de pasajeros disminuye su ganancia.
Además de permisos que trabajadores de este rubro deben realizar para poder llevar a cabo su trabajo, también son afectados por los incrementos de la gasolina.