Visitas: 0
En el Paralibros ubicado en el Parque Benito Juárez, justo atrás del monumento del antes mencionado, los indigentes duermen en el lugar, al igual que realizan sus necesidades, dejando un olor desagradable a todos aquellos que quieran ir a leer, así como el encargado del lugar.
El lugar se encuentra a la intemperie, solo se queda cubierto una parte con lonas, la parte descubierta aprovechan para acostarse y dormir hay o también algunas parejitas en las noches le dan otro uso a esa banca.
Los encargados del lugar han llegado a encontrar excremento embarrado por todo el lugar, así como el olor desagradable que ellos traen consigo.
Las autoridades hasta el momento no han tomado cartas en el asunto, sin darse cuenta que también resultan afectados ellos, con la imagen que quiere dar la nueva administración.