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Por Jaqueline Hernández | Enteratever.com
El escenario del Nicho de la Música esta apagado. ¿Y Emmanuel y Mijares? ¿Y los músicos? La gente lleva una hora de pie esperando a que el concierto empiece, ni la pantalla que cada noche adorna el escenario esta encendida, lo que provoca que las personas se emocionen con el mínimo atisbo de luz.
De pronto una voz se escucha por el micrófono y la gente vuelve a gritar emocionada. “Emmanuel y Mijares llevan una hora esperando atrás del escenario, pero los músicos se han retrasado por el tráfico, les pedimos disculpas y que tengan paciencia”. Solo se necesitaron estas palabras para que la gente empezará a gritar “Culero, culero”, y algunos de los espectadores comienzan a abandonar el Nicho, al parecer no están dispuestos a esperar mas tiempo ahí de pie. Solo los fieles seguidores continúan parados en el mismo sitio y los pocos lugares que estaban vacíos comienzan a llenarse con personas que poco a poco se van recorriendo hacía enfrente.
Cuando las luces se encienden, en el escenario aparece Emmanuel y la gente enloquece. El artista empieza a explicar la situación y el público comienza a decir “Acapella, canten a acapella”. Ante la euforia de la gente, Emmanuel y Mijares cantan unas cuantas estrofas de sus canciones, intentando satisfacer y compensar la espera que ha tenido que pasar la gente.
De repente se ven unos camiones a lo lejos que están ingresando al Parque Temático, las personas vuelven a gritar con la esperanza de que sean los músicos. Y si, al fin han llegado después de una hora de retraso. Rápidamente suben al escenario para colocarse en su lugar y así poder dar inicio al concierto.
La pantalla se enciende, las luces se prenden y la música empieza a sonar. El show al fin ha comenzado. Emmanuel y Mijares salen al escenario y comienzan a entonar la letra de su primer melodía y eso es suficiente para que el público olvide aquella hora que los hicieron esperar de pie.
La noche va transcurriendo y la gente sigue cantando junto a Emmanuel y Mijares. Entre el público alguien grita “Mijares, ¿en donde dejaste a Lucero?” Y las personas que están cerca y han escuchado comienzan a chiflar y a reirse.
Emmanuel y Mijares se han dedicado a cantar todo su repertorio de canciones. Desde “Bella” hasta “Baño de mujeres” y “La chica de humo” hasta “Toda la vida”. Las cuales cada una de las personas que se encontraban presentes aquella noche coreó hasta quedarse sin voz.
La noche fue perfecta a pesar del incidente de los músicos, algo que la gente fue olvidando conforme iba pasando la noche. Y así fue como culminó el festival de Cumbre Tajín, con la presentación de dos grandes de la música, Emmanuel y Mijares.
