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Legalizar las adopciones en México para las parejas homosexuales da derechos a los niños no a los padres, los menores que tienen padres del mismos sexo no tienen los mismos derechos que un menor que crece con padres heterosexual, aseveró Nadine Terrein Roccati, integrante de la Asociación Mundial para la Salud Sexual.
Existe una gran discusión sobre este tema de la adopción gay y los matrimonios igualitarios, luego de que el Presidente de la Republica Enrique Peña Nieto, enviara una iniciativa en el mes de mayo para reformar el artículo 4 constitucional y diversas disposiciones del Código Civil Federal para garantizar la igualdad y la no discriminación a la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Travesti, Transgénero e Intersexual, (LGBTTTI).
Destacó que es importante que se respeten los derechos de todos, enfatizó que no pude decidir la mayoría de la sociedad, sobre los derechos de una minoría, como sucede con las parejas homosexuales.
La sociedad tiene un gran temor a la adopción de parejas del mismo sexo, esto a pesar de que se sabe que las parejas del mismo sexo han educado niños desde hace mucho tiempo, inclusive sin ser legal, “Legalizarlo es solamente darle derechos a los niños no a las personas con una orientación sexual diferente es por los derechos de los niños” agregó.
En ese sentido, recalcó que los menores se encuentran indefensos ya que no cuentan con los derechos que tiene cualquier otro niño, el aprobar las adopciones otorgaría a los pequeños, como ejemplo dijo, existen personas gais que tienen hijos naturales y pero ese pequeño puede tener los derechos que le amparen de la pareja de su padre.
Por otro lado, sobre el tema de los matrimonios igualitarios, señaló que las ventajas que tiene para una pareja estar en un contrato matrimonial es que se les otorgan beneficios de seguridad, protección económica de lo que construyen juntos y garantías que no se reconocen si no existe un documento de por medio.
En México, sólo en 9 de las 32 entidades las parejas homosexuales pueden casarse sin emprender un proceso legal, estas son: Ciudad de México, Coahuila, Nayarit, Michoacán, Morelos, Campeche, Jalisco, Quintana Roo y Chihuahua.
En las restantes, las parejas pasan antes por un largo proceso legal, los inconformes deben quejarse, interponer un amparo en juzgados federales y esperar al fallo de un juez, una vez concluido el trámite el Registro Civil está obligado a casarlos.
