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Raíces de árboles denominados ficus provocaron severos daños a la cancha y servicios sanitarios de un jardín de niños por lo que los padres decidieron derribarlos, pero ahora carecen de un espacio sombreado donde los menores puedan realizar actividades académicas, cívicas, deportivas y artísticas.
Ante esta situación demandan la construcción de un domo en el plantel y para ello acudieron a las autoridades municipales a fin de integrar el comité y reunir los recursos necesarios para levantar la estructura.
Amsi Paola Méndez Ochoa y Delia Lorenzo Gallardo, madres de familia del jardín de niños Helen Keller explicaron que en el patio del jardín de niños existían enormes árboles de ficus que debido a su tamaño las raíces comenzaron a dañar la cancha y los servicios sanitarios, inclusive las raíces empezaron a salir por los lavabos lo que alertó a los padres de familia y para evitar que siguieran dañando los derribaron.
Sin embargo debido a que los árboles proporcionaban sombra para las aulas ahora es casi imposible realizar actividades al aire libre sin que la piel de los niños sufra los efectos de los rayos solares, así que se organizaron y acudieron al ayuntamiento para solicitar la construcción de un domo.